MOLINO DE LA CERCA O DE SANTA ANA





El molino de la Cerca se encuentra ubicado en  Santa Ana, en el termino municipal de Cartagena, a unos 6 Km de distancia de dicha ciudad y a escasos 10 Km de la costa del Mar Mediterráneo y del Mar Menor.
Muy cerca de la Iglesia de Santa Ana, que se encuentra en la zona más antigua, está el enclave del molino, denominado Molino "La Cerca" o ¿molino de Santa Ana¿, que fue reconstruido durante el año 1.999.
Esta construcción se encuentra  emplazada en "el Andén", el cenit de una plataforma circular realizada con piedras calizas rellenas con tierra.
La cimentación de esta tipología arranca desde la base de la plataforma, su estructura es un muro de carga en forma troncocónica, con una sola puerta, ejecutada en fábrica de mampostería no careada, utilizando mortero de cal y arena. Las piedras son del tipo calizo de las encontradas en los alrededores.
En la parte exterior nos encontramos el pozo, sobre el que se sitúa la rueda de arcaduces o noria del molino, apareciendo, alrededor de esta, un brocal de mampostería no careada.
El molino consta de dos cuerpos. En el primer cuerpo se encuentra la linterna de abajo y la rueda del infierno. De este cuerpo arranca la escalera, mientras que en el segundo cuerpo nos encontramos la maquinaria.
Del eje o botalón del molino salen los palos que sujetan el velamen. Situada en el término medio del botalón nos encontramos la rueda de aire.
La rueda terrera es la pieza que cierra lo alto de la torre del molino, sobre ella se apoya el telar, que es el armazón de madera que hace la función del soporte horizontal y rotatorio de las piezas verticales de la maquinaria.
Historia
El documento de más antigüedad que atestigua la presencia de los molinos de viento data del año 1755. Siendo en el siglo XIX cuando más proliferan.
La escasez de agua ha sido uno de los problemas principales de la comarca de Cartagena, necesitando durante siglos un gran esfuerzo para hallarla en el subsuelo y elevarla para el riego de los campos. Por esta razón el molino más abundante y significativo de los del Campo de Cartagena es el de agua, debido a la continua sequía de la comarca.
Este tipo de construcciones reemplazó a las llamadas norias de sangre o de tracción animal, en ellas los cangilones, sujetos con maromas, elevaban el agua hasta una balsa para su posterior distribución a los campos de cultivo,  utilizándose estas norias  hasta que llegaron los molinos de agua a toda la comarca en el siglo XIX.
Dirección: Santa Ana.Cartagena














IGLESIA DE SANTA ANA





Información:

La iglesia se encuentra situada en el paraje denominado Los Ventorrillos enclavada en los terrenos que pertenecieron a la finca denominada La Almazara, pues en ella se prensaba la aceituna y además se fabricaba pimentón, cuyos dueños cedieron el terreno para la construcción de la primitiva ermita. Cuando se formó la parroquia de Pozo Estrecho perteneció a ella, pasando a parroquia propia en 1913 junto con la ermita de La Guía, siendo su primer cura rector Manuel Guillén Sánchez, que administró en ese año por vez primera el sacramento del bautismo a Antonio Ambrosio Barrio Ávila, asistió a la primera fallecida Josefa Tardido Ferrer y casó a José Nieto García y Ana María Navarro Pérez.

La primera referencia que conservamos en nuestros apuntes es el fallecimiento el 4 de mayo de 1908 de Blas Marín, anciano virtuoso y venerable sacerdote que por espacio de 30 años estuvo encargado de la ermita.

En los primeros días del año 1952, durante la romería que con motivo del traslado de la Virgen de Fátima desde la finca Lagosi a la ermita, se efectuó la bendición de una imagen de Cristo Crucificado por el sacerdote José Galindo Pérez.

Entre los años 1968 y 1971 se llevó a cabo una reconstrucción del edificio. A la arquitectura del edificio, de sencilla planta rectangular, en su entrada principal se le ha adosado la torre campanario de tres plantas y el bajo sirve de atrio. A través de varias vidrieras situadas en la fachada y el lienzo oeste recibe abundante luz en su interior, que iluminan con naturalidad las imágenes del Crucificado y la titular que reciben culto en el altar mayor.

La primitiva ermita de Santa Ana, hoy convertida en iglesia parroquial conjuntamente con la ermita de La Guía, figura en el Anuario de la Diócesis de Cartagena de 1996 a cargo de párroco de El Albujón, en la Zona Pastoral de Cartagena, Arciprestazgo núm. 14: Zona Norte, parroquia núm. 113. Hoy bellamente remozada entre los años 1968 y 1971, su planta es rectangular de 16 x 12 m sobre la antigua ermita que en el mismo lugar existió. Superpuesta a la fachada principal se ha construido una torre de planta cuadrada y quince metros de altura, donde de sitúan el atrio de la iglesia y en la tercera y última planta el campanario. Dan luz al edificio tres vidrieras de colores con dibujo, situadas en el muro izquierdo, así como cuatro vidrieras móviles, también de colores con dibujo de cruz latina, situadas dos en la fachada principal y dos a ambos lados de la torre.

En el altar mayor se encuentran las imágenes de Cristo Crucificado, Santa Ana, la Virgen de la Caridad y el Sagrado Corazón de Jesús, esta última donada por José García Cotanda en 1942. En el muro de la derecha se encuentran las imágenes de la Inmaculada, restaurada por S. Morales y Azcoitia en 1982, y Cristo Crucificado. En el muro de la izquierda y muy próximo a la entrada se encuentra la imagen de la Virgen de Fátima.
Resumen del libro "Los pueblos de Cartagena" de Juan Antonio Gómez Vizcaino








Ya tocaba dedicarle un artículo a la localidad de Santa Ana, como en cierta ocasión me reprochó amigablemente el fotógrafo Pepe Albaladejo, quien allí mora. Pero comenzaremos por el principio. Santa Ana, como todo el mundo sabe, es madre de la Virgen María y abuela de Jesús de Nazaret. Conocemos algunos datos de su vida por un evangelio apócrifo, es decir, no reconocido oficialmente por la Iglesia, el llamado Protoevangelio de Santiago. El término Proto significa que relata historias anteriores al nacimiento del propio Jesu-Cristo. Efectivamente, este texto cuenta que estaba casada con Joaquín, formando una familia acomodada pero sin descendencia. Joaquín oró y ayunó durante cuarenta días y cuarenta noches rogando a Dios que le concediese un hijo. Por fin, un ángel se les apareció para anunciarles que Ana sería madre. Tuvieron a María, Miriam o Mariam, que desposó con José cuando era una niña de doce años.
Hay pueblos y ciudades que la tienen como patrona en Alemania, Austria, Canadá y en España, pero menos son los que además la llevan en su nombre. Casos encontramos en México, Costa Rica, El Salvador, Venezuela y en Cartagena: nuestra Santa Ana.
Juan Antonio Gómez Vizcaíno, recogiendo una sugerencia del profesor García Martínez, aventura que posiblemente el topónimo de nuestro vecino pueblo provenga del culto a esta santa porque en Cartagena existió una gran devoción por ella, como revela la fundación en 1541 del hospital benéfico municipal, situado en la plaza mayor, bajo su advocación. Se celebraban fiestas solemnes en su honor, asistiendo la Corporación, las cofradías y los vecinos. La imagen de Santa Ana era llevada en andas desde el callejón de Santa Ana, hoy calle de los Bodegones, seguía por el callejón del Coliseo, calle Mayor y plaza de Santa Catalina. Toda esta celebración concluyó en 1820, año en que desaparece el hospital y su templo.
La II República trajo cambio en las denominaciones de calles y de poblaciones, adoptando el Ayuntamiento de Cartagena el acuerdo el 14 de julio de 1937 que el pueblo de Santa Ana pasase a llamarse Leopoldo Alas (1852-1901). Se rendía homenaje a este escritor y catedrático de Economía Política, de ideología progresista y republicana, que firmaba con el seudónimo Clarín, autor de una de las obras cumbres del castellano 'La Regenta'. Tras la guerra civil volverá a su antiguo nombre.
La primera noticia escrita que refiere la existencia de un grupo de casas llamadas Santa Ana fue en el año 1683 y también sabemos que en 1715 contaba con 168 habitantes, ascendiendo a 320 en 1771. Por esa época eran apellidos frecuentes por estos pagos Rosique, Conesa, Martínez, Sánchez, Montesinos, Vidal y Carrión. La población ha ido en aumento alcanzando la diputación, que incluye núcleos como los Ventorillos, Los Piñuelas y Molino Derribao, la cifra de 2.488 y 154 extranjeros, según datos municipales correspondientes a 2012.
Tenemos noticias de la existencia de la ermita en 1790, perteneciente a la parroquia de Pozo Estrecho, aunque Andrés Nieto en su obra 'Santa Ana en su historia' propone que su construcción pueda datar de mediados del siglo XVI, sobre 1650. La tradición oral narra que la vieja ermita se erigió en los terrenos de la finca La Almazara, siendo la esposa del dueño quien más influyó en esta donación porque tenían una hija casada que nos les había dado nietos. Su propósito era dedicarle una ermita para solicitar el auxilio de Santa Ana, la patrona de las embarazadas y las mujeres estériles. Su elevación a parroquia se produce el día 20 de abril de 1913. Podemos apreciar aún fotografías del templo cuando contaba con una hermosa galilea, un pórtico o atrio techado de entrada, con tejado a dos aguas, que lamentablemente fue eliminado en la reforma de 1950. No sería mala idea recuperar este elemento arquitectónico cuando la situación económica así lo permita.
Muy cerca encontramos el molino de sacar agua conocido como el molino de La Cerca, restaurado con fondos europeos y reinaugurado en el año 2000, recibiendo desde entonces la visita de numerosos escolares y turistas. A esta empresa feliz contribuyeron mucho los esfuerzos del entonces concejal Enrique Pérez Abellán, la asociación de vecinos y en especial el vecino Cayetano Pagán, ya fallecido.
Otro lugar singular y que conocemos por Andrés Nieto, del que ya apenas quedan vestigios, aunque sí testimonios gráficos, era una torre de muros gruesos con una galería subterránea, de 12 metros de larga por unos 1,80 de alta y 3,20 de ancha, de la que parten otras galerías laterales. Aventura Andrés que esta construcción podría ser contemporánea de la desaparecida torre árabe de El Albujón, del siglo XIII. Algunos autores de época musulmana nos describen un campo cartagenero con norias, huertos frondosos y casas torre fortificadas para defenderse de los peligros, entre ellos los cristianos. Lamentamos que la falta de conciencia acerca de nuestro patrimonio cultural material e inmaterial nos llevara y nos siga llevando por caminos perniciosos de barbarie. Estas torres y galerías han servido posteriormente de defensa de cuantas guerras y pillajes han sobrevenido a los aldeanos del lugar. En una llanura, como corresponde a nuestra comarca, la mejor defensa es esconderse bajo tierra, ya que no existen masas boscosas ni cordilleras importantes

IGLESIA DE SANTA FLORENTINA (LA PALMA)




Información

En la diputación de La Palma encontramos a través de su historia dos ermitas, una de ellas fue convertida en parroquia, al igual que las de Pozo Estrecho y Alumbres, desmembrándose todas ellas de la parroquial de Cartagena erigiéndose en parroquias con rectores propios separados y perpetuos un 8 de febrero de 1700 por decreto del obispo de la diócesis Francisco Fernández Ángulo, materializando así una decisión que ya se había tomado en el año anterior. Actualmente se constituye en ella la parroquia nº 175, arciprestazgo nº 18 (Campo de Cartagena), IV zona pastoral de Cartagena.

Así inició su andadura, bajo la advocación de Santa Florentina, sobre el territorio comprendido en su propia diputación, la de los Santos Médicos y en la de Lentiscar los partidos de La Puebla, Los Camachos y La Aparecida. Quedan también bajo su protección las ermitas de los Santos Médicos, así como las de San José, San Juan y Nuestra Señora de los Dolores.

En la colección documentos de Vargas Ponce se recoge un fragmento del manuscrito de Hermosino y Parrilla en el que se dice que su iglesia es muy capaz y pulida, con las ermitas de San José, Nuestra Señora de las Angustias y San Juan, pues transcurridos treinta años de su fundación ya habían finalizado las obras del templo, sacristía y torre.

Una de las singularidades de este templo es la cripta existente a lo largo de nave central, capaz para más de un centenar de enterramientos, destinados a las clases más desfavorecidas ya que para las demás se destinaban las capillas e incluso el altar mayor, lo que perduró hasta principios del siglo XIX que se dispuso de Campo Santo.

Su riqueza de imágenes siempre ha sido extraordinaria, procedentes muchas de ellas del extinguido convento de San Agustín de Cartagena, pues en el año 1933 tenemos referencias que se encontraban al culto en el altar mayor las de San Vicente Ferrer y Santa Rosalía, a derecha e izquierda de la titular; en las naves laterales San Judas Tadeo, Cristo Crucificado, Nuestro Padre Jesús Nazareno, Nuestra Señora de la Consolación, Sagrado Corazón y Purísima Concepción, Santa Ana, Virgen del Rosario, San José, San Buenaventura, Vírgenes de la Soledad y del Carmen, San Antonio Abad y San Antonio de Padua. Poco o nada quedó de todo esto tras la barbarie iconoclasta que se apoderó de las masas en el año 1936 al comienzo de la guerra civil.

Recientemente ha sido restaurada y se han recuperado pinturas y decoración originales, muchos años tapadas por desafortunados trabajos de reparación. La visita al lugar constituye un verdadero placer lleno de sensaciones estéticas, completada con la observación del magnífico retablo, obra de la casa Pujante de Murcia, que se colocó en el año 1954.
Resumen del libro "Los pueblos de Cartagena" de Juan Antonio Gómez Vizcaino


Sobre la restauración






ERMITA DE LOS MEDICOS (LOS MEDICOS)




Información:
La ermita de Los Santos Médicos se encuentra situada a la altura del paraje conocido como Los Segados, en el triángulo formado por Santa Ana, Pozo Estrecho y La Palma.
Data del Siglo XVIII y se encuentra bajo la advocación de los Santos San Cosme y San Damián, patrones de la profesión médica.
Se trata de un edificio exento, de factura sencilla, emplazado sobre una terraza de baldosa roja. La ermita tiene forma de crucero y es bastante amplia. Detenta una puerta principal y otra lateral para subir al coro.
La fachada principal deja ver los tres cuerpos interiores, uno central más ancho y alto, con el portón de entrada de madera  con arco de medio punto y detalles de remaches. Sobre el portón un oculo, que ilumina el coro. Coronando la fachada  una espadaña sencilla con campana suspendida. La fachada se encuentra rematada con pintura de obra en color amarillo con bordes en marrón y la espadaña en blanco. Un detalle a destacar de  la fachada principal es que  hay una losa de mármol adosada que reza: "Suspendidas las obras de éste templo, que habían tenido principio el año 1766. Las continuó y concluyó el 1866 el maestro Francisco Esteban Marín a expensas de varios bienhechores".
Entrando a la derecha tiene un pequeño altar con una imagen del Dulce Nombre de María, y a la izquierda una imagen de Sana Ana junto a dos cuadros. En el crucero hay dos altares, en el de la derecha tiene una Virgen del Carmen y en el de la izquierda un Sagrado Corazón. En el altar mayor, una hornacina que en su parte baja tiene un retablo de obra, en el que están los Santos Cosme y Damián, y en la parte superior una paloma representando el Espíritu Santo. El crucero tiene un par de ventanales acristalados con una cruz de vidrio rojo. El suelo está enlosado con losas de principio de siglo. En la parte del crucero hay un pequeño órgano que porta un emblema de la casa constructora, dice: “Medalla de Oro y decoración de la Exposición Universal 1878”. Concurso de Honor a Jerome Thibouville-Lamy.
Tiene pequeños cuadros de vía crucis, algunos son de relieve y están bien trabajados. Hay un cuadro de Nuestro Padre Jesús Nazareno bordado en hilo sobre relieve, con un fondo de seda que lleva una orla y estrellas en el centro, todo ello en tono dorado.
Historia
Con motivo de las epidemias que padecía Cartagena en el siglo XVIII, se aposentaron en este lugar unos médicos que habían venido de Castilla para atender el Hospital Real, por lo que poco a poco fue introduciéndose en los lugareños el nombre de Los Médicos, ya que estos residían allí.
Una noticia en "Semanario y Curioso de Cartagena" del 13 octubre de 1786 dice que existía una asociación de médicos llamada “Academia Médico Práctica Cartagenera”, que tenía por patronos a Ntra. Sra. de la Salud y a los Santos Médicos, celebrando su fiesta en el convento de La Merced.  Es muy posible  que estos también sostuvieran el mantenimiento de la ermita.
Dirección: Paraje Los Segados .Cartagena


En el paraje de los Segados de la diputación de Los Médicos, bajo la advocación de los Santos Cosme y Damián, subsiste una airosa ermita en cuya fachada principal podemos leer una placa cuyo texto es el siguiente: Suspendidas las obras de este templo que habían tenido principio el año 1766, las continuó y concluyó en 1866 el maestro Francisco Esteban Marín a expensas de varios bienhechores.

La existencia de una ermita bajo la advocación de estos mártires griegos, hermanos Cosme y Damián, que fueron decapitados por orden de Diocleciano en el año 287, puede ser debida a su patronazgo sobre la profesión médica, pues los dos fueron médicos en Arabia, ya que desde siempre los cristianos sintieron una honda y sentida devoción erigiendo templos en su honor donde se acudía a ellos en las enfermedades. No es extraño pues que en esta zona donde siempre se han hecho sentir las epidemias se recurriera también a su intercesión.

Como todas las ermitas que aún existen en el Campo de Cartagena, tiene en su interior un coro a nivel superior y numerosas imágenes, fruto generalmente de donaciones ya que se mantienen los cultos y romerías desde muy antiguo, aunque bien es verdad que con la escasa asistencia de los moradores y personas que mantienen en sus proximidades una casa como residencia eventual. En torno a esta ermita se vienen celebrando las tradicionales fiestas en las que luce el baile de las castañuelas, de las que sabemos que en el año 1918 fueron organizadas por Fernández Mayordomo, Francisco Atienza y Luis Blanco y que en 1918 celebró misa en ella el jesuita Francisco Sánchez Rosique nacido en Los Vidales.

En su planta de cruz latina se albergan las imágenes, además de las de los titulares en el altar mayor, las del Dulce Nombre de María y un cuadro de la Virgen de la Caridad en la nave principal y las del Sagrado Corazón de Jesús y Virgen del Carmen en la nave transversal. Pero quizá el elemento más curioso que en ella se conserva es un órgano, obra de Jérome Thibouville-Lamy, que tiene adherida la Medalla de oro a la decoración de la Exposición Universal de París en 1878.
Resumen  del libro "Los pueblos de Cartagena" de Juan Antonio Gómez Vizcaino

ARTICULO DE JOSE SANCHEZ CONESA
PUBLICADO EN LA VERDAD EL DIA 28/09/2014

"Cosme y Damián eran dos hermanos gemelos nacidos en el siglo III en Asia Menor, la actual Turquía. Estudiaron medicina y ejercieron en Egea, hoy Ayás, Siria. Fueron llamados anárgiros, que significa los desprendidos debido a que no cobraban a sus pacientes necesitados. Por su fe cristiana fueron denunciados por otros colegas ante el gobernador, representante en la región del emperador romano Diocleciano, siendo decapitados tras numerosas torturas como ser quemados vivos, apuntándose varias fechas como el año 287, el 286 o quizá el 303. La leyenda narra que la espada que les dio muerte se expone en la catedral alemana de Essen, con funda de oro, representada en el escudo de la ciudad. Este emperador se caracterizó por impulsar una de las más duras represiones llevadas a cabo contra los cristianos con el objetivo de reforzar el culto imperial, al que se oponían estos creyentes pues solo reconocían un Dios único y la igualdad de los hombres que preconizaban nada tenía que ver con el esclavismo y el militarismo, las bases del Imperio.

Entre sus milagros nos llama poderosamente la atención el trasplante que realizaron al sacristán de la basílica de San Cosme y San Damián en Roma, aquejado de un tumor en una pierna, injertándole la procedente de un criado negro de origen etíope, ya fallecido. Esta acción fue inmortalizada por el pintor Pedro Berruguete en 1490, pudiéndose contemplar en la Real Colegiata de San Cosme y San Damián de Covarrubias (Burgos). Otros milagros que se les atribuye a los santos tras su muerte fue la vuelta a la vida de un campesino, a quien durante el sueño se le introdujo una víbora en la boca, asfixiándole.

También han curado animales, a mancos, mudos, sordos, cojos, ciegos, apestados o afectados por fístulas en el ano. Muchos no saben que San Damián está además especializado en hemorroides.

La ermita de Los Médicos fue lugar de culto y ámbito de una importante acción social, por ser escuela
Estos santos médicos son patronos de trabajadores de balnearios, niños, cirujanos y médicos, de la localidad de Abarán, o de Cortes de Baza (Granada). Un municipio mexicano lleva el nombre de San Damián.

Iglesia en el campo

El doctor José López González les dedicó una interesante comunicación en el III Congreso Nacional de Etnografía del Campo de Cartagena, así como Ernesto Ruiz Vinader un capítulo de su libro 'Ermitas y cosas de Cartagena'. Estos autores proponen que el culto a los santos en el Campo de Cartagena estaría ligado a unos médicos que, procedentes de Castilla residieron en aquel paraje, vinieron al Hospital Real para atender pacientes afectados por las numerosas epidemias de la época. La tradición oral así nos llegó por el vecino Salvador Segado, quien residió a la sombra de la ermita. Existió en el citado siglo una asociación de médicos llamada Academia Médico Práctica Cartagenera, que tenía por patronos a Nuestra Señora de la Salud y a los Santos Médicos, celebrando su fiesta en el convento de la Merced. Es posible que esta asociación contribuyera al sostenimiento de la ermita del campo, hermosa, señorial y de grandes dimensiones.


Otras interesantes curiosidades que nos plantea este médico, escritor e investigador es la posible existencia de una ermita anterior a la actual que comenzó a levantarse en 1766, concluyendo su edificación en 1866, como reza la losa de mármol de su fachada. Basa su hipótesis en la noticia que generaron, en el año 1703, unos mozos que se amotinaron en la ermita de Los Médicos pues no querían servir en el Ejército. Los insumisos del momento.

Durante la guerra civil fueron destruidas las imágenes de los titulares, tallas de madera, de 50 centímetros de altura, 'feicos', en el decir de los informantes del doctor López González. Los feligreses iniciaron una campaña de recaudación para adquirir en 1945 las imágenes que ahora lucen en el altar mayor, más esbeltos (120 cm.) y con vestimenta romana. Cosme porta un albarelo o recipiente cerámico usado para contener productos farmacéuticos porque en aquellos tiempos lejanos el propio médico era quien los elaboraba. Damián es representado con un pergamino o también con un libro.

El pintor Pedro Diego Pérez Casanova realizó unas ilustraciones y escribió para el citado trabajo de José López una quintilla trovera: «Dos santos te escucharán/ en el Campo de Cartagena./ Tus males mitigarán/ y te darán salud plena/ San Cosme y San Damián».

La ermita fue lugar de culto y ámbito de una importante acción social por su función escolar durante siglos (ya era escuela en el año 1790), ocupando a tal fin una nave ubicada a la derecha. La situada a la izquierda fue vivienda familiar de las ermitañas que, hasta la década de los 80 del pasado siglo, se encargaban del toque de campana, limpieza y mantenimiento del recinto sagrado. Eran elegidas por el cura y la junta de la ermita, que entre 1945 y 1957 estuvo presidida por Dolores Albaladejo Meroño, la tesorera era Julia Bolea y la secretaria, Inés Segado.

Caseríos habitados

En la comunicación presentada al Congreso Etnográfico se informa de la celebración en 1927 de la primera comunión de los niños y niñas de aquella escuela y que presidió el párroco José Marco Marco, de La Palma, a cuya parroquia está asociada la ermita. En esos tiempos los caseríos diseminados por el campo estaban mucho más habitados que ahora.

En 1949 estuvo al frente de la celebración eucarística el sacerdote Juan Iniesta Gil, cantada que fue por las señoritas de Los Médicos, acompañadas por la palmesana Paquita Moreno tecleando el armónium y los violinistas Juan Bolea y Pascualín, avecindados en aquel paraje. En efecto, la misa era un acto importante en las fiestas patronales del lugar, así como la degustación del vino del terreno, las verbenas o las cintas a caballo. Tras unos años sin celebrarse se reanudaron en 1990 con el apoyo de la asociación de vecinos de La Palma, especialmente su vocal de cultura José Casas Sánchez. Se incorpora entonces una importante novedad como es la romería que sale desde el templo parroquial palmesano, acompañando la imagen de los Santos Médicos. El cortejo se detiene en el monasterio del Cister para finalizar en la ermita. Tras la misa, una comida de hermandad. Será, como siempre, el último domingo de septiembre, tal y como nos dice Patricio Segado, al frente del festejo."







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VILLA PILAR




Información:

De V. Beltrí. 1925.
Villa Pilar, Pérez Rojas dice que es un edificio ...de enfoscados azules que responde a los modelos del casticismo regionalista, con torre descentrada a cuatro aguas y terrazas de diversos noveles... Entre los elementos externos destacan el pozo por sus ...detalles modernistas y la vivienda de los guardas que a modo de nave rectangular con altos techos y vigas de madera, tiene en su fachada esa ordenación clasicista de las naves industriales.
Del libro "Los pueblos de Cartagena" de Juan Antonio Gómez Vizcaino









MOLINO DE LOS LUENGOS




Información
Dice el profesor García Martínez en su obra sobre Los Molinos de Viento de Cartagena, publicada en el año 1969, que ... en la comarca de El Algar, muy próxima al Mar Menor, de continuos vientos, es donde más molinos hay..., y cuando los relaciona enumera 16 de sacar agua funcionando y 6 que tan sólo conservan la torre. Hoy día podemos apreciar en buen estado el molino de los Luengos El Gigante, de 10 velas y maquinaria de hierro, de sacar agua; el molino de la finca El Pino, igual que el anterior; el molino de Cobacho y el molino Lo Rato, de sacar agua y 10 velas.
Resumen  del libro "Los pueblos de Cartagena" de Juan Antonio Gómez Vizcaino